Por Fernando Hernández Gómez
fdohernandezg@hotmail.com
Sin despilfarrar en un acto pomposo como el que
estilaron sus antecesores priistas y el perredista, ni recurrir al discurso
plagado de demagogia y autoelogios, Adán Augusto López Hernández cumplió ayer
su compromiso de presentar –lo hizo personalmente, luego de 28 años que ningún
gobernador acudía al Congreso del Estado a hacerlo– su Primer Informe de Gobierno.
En menos de una hora y ante 300 invitados –entre
alcaldes, legisladores federales, empresarios y representantes sociales–, López
Hernández hizo un resumen muy sobrio y con datos
duros de lo que ha hecho estos 11 meses en el poder para sacar a Tabasco
del caos en que lo encontró.
La sesión solemne de la 63 Legislatura local tuvo
un formato distinto al de los rituales
del pasado: el jefe del Ejecutivo dirigió un mensaje y luego –por primera vez–
escuchó los posicionamientos de representantes de las cuatro bancadas que, sin
salirse de su discurso habitual, abonaron a la civilidad del evento. Al final
el gobernador tuvo, a manera de réplica, una intervención final.
En su mensaje, el mandatario estatal –que tuvo
entre los invitados a la secretaria de Energía, Rocío Nahle García, en calidad de representante presidencial– reitero su
llamado a la unidad y a la
reconciliación. “No importan la
diferencias políticas e ideológica; desde ahí podemos construir”,
remarcó.
Tres temas centrales descollaron en el
informe de Adán Augusto López: finanzas, seguridad y salud.
Puntualizó
que en estos 11 meses de gestión, ha trabajado en dos vertientes: 1) establecer
bases para generar equilibrio en las finanzas públicas estatales, que estaban
prácticamente en la quiebra, por lo que debió reorientarse el gasto y la
administración pública, y combatir el déficit de cinco mil 400 millones de
pesos encontrado, y 2) con una política de austeridad republicana, se han
recuperado mil 500 millones de pesos que se iban en gastos superfluos, aviones,
escoltas, operación de la casa de gobierno (Quinta
Grijalva) y en una partida de comunicación social, que se ha cancelado
porque se inicia “una nueva etapa”.
Dijo
que “para nadie es un secreto” que todavía se mantienen en índices
estadísticamente más allá de la media nacional, el homicidio doloso y el
narcomenudeo que han aumentado en relación a otros años, en tanto que la
violencia intrafamiliar y violación son “nuestra piedra en el zapato”.
Sin
embargo, afirmó que todos los días se trabaja para generar condiciones, para recuperar
y ganar pronto la batalla contra la inseguridad; “les decimos con orgullo que
hay delitos que laceraban a los tabasqueños, como el secuestro que ha disminuido
en relación al último año, en 67 por ciento; el robo a comercio, 32
por ciento; el abigeato ha disminuido 21 por ciento; el robo a casa-habitación,
1.7, y robo a transeúnte, el 14 por ciento con relación al año pasado”.
Expuso
que al inicio de su administración se encontró “un sistema de salud desecho”, y
poco a poco se ha ido avanzando para recuperar los servicios en los hospitales,
y resolver el desabasto de medicamentos en unidades del sector, donde ya hay un
stock cercano al 70 por ciento de fármacos.
Cerró
este segmento, con el compromiso a seguir trabajando para que en los centros de
salud comunitarios y de servicios ampliados, y en los hospitales de alta
especialidad no falten médicos ni medicinas, y destacó que en prevención de
enfermedades, Tabasco pasó del primero al lugar 12 en incidencia de dengue.
En
varios momentos, el gobernador tuvo palabras de agradecimiento para el
Presidente Andrés Manuel López Obrador
por los apoyos en programas sociales dirigidos a jóvenes y a productores
rurales, y resaltó que el recurso que se derraman en los 17 municipios como
parte de los programas federales, es prácticamente el doble del presupuesto
anual de los 17 ayuntamientos.
Aunque
López Hernández puntualizó que Tabasco no es nada más la realidad de la
refinería de Dos Bocas, subrayó que debe aprovecharse la recuperación de la
industria y la riqueza energética, para poco a poco sembrar progreso.
En su réplica,
el jefe del Ejecutivo propuso a los diputados locales regresar el 3 de diciembre al recinto legislativo, para
debatir con ellos las dudas que queden del Primer
Informe y el presupuesto del 2020, cuya propuesta enviará al Congreso local
antes del 30 de noviembre.
El ambiente de civilidad que prevaleció en
esta sesión solemne, sin duda que motivó al titular del Poder Legislativo para
expresar su disposición a que, por primera vez, todos los secretarios de su
gabinete acudan ante el pleno a la glosa del informe e, incluso, que en una
segunda comparecencia, él mismo pueda debatir con los legisladores los dudas que
aún queden en torno a lo realizado el primer año de gobierno, a las políticas
públicas que ha implementado y al sentido que dará al presupuesto del estado
para el 2020.
Existe voluntad para gobernar Tabasco con
diálogo y consensos, aunque en la máxima tribuna del estado el priista Gerald Washington Herrera habló ayer de
avasallamiento en el Poder Legislativo.
AL GRANO
NO
DEBE PASAR desapercibido un punto ayer en el mensaje del gobernador Adán
Augusto López cuando habló de la reorientación del gasto y de su plan de
austeridad… Dijo: “se ha terminado la partida (presupuestal) de comunicación
social; nos toca una nueva etapa de informar, de comunicar”…
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