Por Fernando Hernández Gómez
fdohernandezg@hotmail.com
Difícil entender a los
priistas tabasqueños. Estaban dale y dale
que el Comité Ejecutivo Nacional enviara a un delegado que metiera orden; mandaron a Jorge
Salomón Azar García, ex gobernador de Campeche y ahora lo quieren crucificar.
Si
alguien dudaba de lo que sucede en el tricolor, el delegado del CEN lo
confirmó.
El PRI Tabasco –partido
opositor desde el 2012– sigue siendo un caos. No sólo no tiene pies ni cabeza, no se le ve futuro.
A Jorge
Azar lo enviaron a que renovara la dirigencia estatal y generara condiciones
para lo que viene después –el 2018– y se llevó un chasco:
–Hay la percepción, Jorge, que quieres la ‘cabeza’
de (Miguel Ángel) Valdivia… –le plantearon al
representante de la dirigencia nacional priista, el viernes 31 de marzo, en Telerreportaje.
“Yo no
quiero la cabeza de nadie… la verdad, yo vine aquí a hacer un trabajo que me
encomendó el presidente del CEN del PRI (Enrique
Ochoa Reza) y que los tabasqueños le pidieron a él cuándo vino de gira; le
pidieron enviara a la brevedad posible a un delegado… no vengo por la cabeza de nadie; vengo por petición de
los tabasqueños”, expuso el ex mandatario campechano.
–Pero son evidentes las diferencias entre
Valdivia y tú… ¿En qué momento se rompió la relación? –le inquirió el inquisidor Emmanuel Sibilla.
“No se ha
roto la relación. En un inicio llego y él (Valdivia) es el que me recibe como ‘presidente encargado’ de la institución
del partido político al que pertenecemos”, contestó.
–Siempre hemos visto que el delegado y el
dirigente van de la mano y ahora no vemos eso. ¿No reconoces que hay
diferencias?
“Puede
haber diferencias pero no enfrentamiento. De mi parte, al menos, no”, aseguró
en un primer momento.
En la
entrevista en la estación XHVT se quedó el delegado del CEN que la función de
Valdivia como ‘interino’ era generar condiciones para designar a un relevo. “Estatutariamente
tenía 60 días para convocar a elecciones y fuera sustituido por una
persona que eligiera el Consejo Político y que terminara el periodo para el que
fue electo”, dijo, Valdivia no lo hizo.
–¿Es ilegitima la dirigencia de Valdivia?
“Pudiéramos
decir que sí, contraviene en los estatutos”, expresó Jorge Azar.
Pudiéramos
transcribir aquí la extensa entrevista que Emmanuel Sibilla hizo el fin de
semana a Azar García, pero no aporta gran
cosa de un trabajo político de parte del campechano. Su función era quitar
al dirigente estatal y no lo logró.
Todavía
quiso ir más allá. En lugar de quitar a Valdivia y nombrar a un presidente
sustituto que concluyera el periodo iniciado por Erubiel Alonso Qué, trató de establecer una dirigencia de cuatro
años. No lo logró. Es más, aun cuando el CEN requirió a Valivia para buscar “una
salida digna”, nada se pudo.
–¿Es un rebelde Valdivia? –se le
inquirió.
“Yo creo
que la actitud del presidente Valdivia ‘encargado del despacho’ del CDE del PRI
complica las cosas, pero acusarlo de rebelde tendría que tener algunas otros
atributos que no le veo”.
–Entonces, ¿a Valdivia le podríamos decir
aferrado?
“Acomodaticio,
vamos a darle una calificación, ¿no?”, contestó el delegado.
–Caramba, ¿está flotando Valdivia? ¿Está
nadando de a muertito?
“No sé si
de a muertito...”.
–¿Jorge Salomón Azar es el delegado del CEN
del PRI en la entidad?
“Todavía”.
–¿Estás pensando irte, en renunciar?
¿Te das por vencido?
“No,
nunca”.
Se le planteó
que había rumores de que de su parte existía ‘complicidad’ para que alguien
afín a la diputada federal Georgina Trujillo
Zentella, aspirante a la candidatura priista al gobierno estatal, pudiera
hacerse de la dirigencia priista. Respondió:
“No. Esas
son las cosas que desafortunadamente no contribuyen a construir consensos y
acuerdos, y sí enrarecer el ambiente, las especulaciones y yo no soy especulero, no me gusta especular
(risas)”.
Miguel
Ángel Valdivia salió a replicar, a asegurar que no era un dirigente acomaditicio. Aseguró que sus diferencias
con el delegado del CEN se resumían en esta frase: falta de comunicación, y
allí acordaron una reunión el martes 4.
AL GRANO
JORGE SALOMÓN se
equivocó. Los tabasqueños no se parecen a los campechanos, ni en sus sueños más
absurdos…
No hay comentarios:
Publicar un comentario