martes, 26 de noviembre de 2013

Columna Sin RODEOS: Y el PRD ‘se hizo de la vista gorda’

Por Fernando Hernández Gómez
fdohernandezg@hotmail.com
Especial para diario Rumbo Nuevo

¿Será posible que la 3ª Comisión Inspectora de Hacienda del Congreso local, que ayer aprobó el dictamen de la cuenta pública 2012 del ayuntamiento de Centro –junto con las de Comalcalco, Jalpa de Méndez y Paraíso– se haya basado, para dar su fallo, en los informes amañados que le envió el anterior fiscal superior Francisco Rullán Silva?
¿Será posible que el nuevo titular del Órgano Superior de Fiscalización (OSF), José del Carmen López Carrera, no haya intentado siquiera dar una ‘ojeada’ al dictamen del último ejercicio fiscal del anterior alcalde, Cuauhtémoc Muñoz Calderas, para darse cuenta de omisiones o inconsistencias, y ordenar nuevas auditorías, como lo hizo con la cuenta pública 2012 del entonces jefe del Ejecutivo estatal, Andrés Granier Melo?
El hecho que la cuenta pública del último año del gobierno paraiseño –presidido por el extinto perredista Cristóbal Javier Angulo– haya sido aprobada por unanimidad, no tiene nada de raro; al fin y al cabo éste tenía la misma militancia que los diputados que ahora son mayoría en el Congreso local.
Pero que se hiciera lo mismo –aprobarla por unanimidad– con la cuenta del ayuntamiento de Centro, es otra cosa. Hay mucho ‘sospechosismo’, sobre todo después que el actual alcalde capitalino, Humberto de los Santos Bertruy, exhibió ‘con pelos y señas’ el cochinero en que quedó convertida la administración municipal luego que la encabezaron Jesús Alí de la Torre y quien fuera su director de Obras Públicas, Cuauhtémoc Muñoz.
Para despejar dudas sería sano cotejar el dictamen de la cuenta pública 2012 de Centro que el OSF envío a los legisladores, con el informe del proceso entrega-recepción que presentó el 12 de septiembre el contralor municipal Sergio Hermilo Jiménez Torres, para encontrar diferencias y determinar quién miente.
Incluso, habría que comparar las irregularidades no solventadas que se estarían señalando en este municipio, con las que aparecen en la cuenta pública 2012 del gobierno estatal, para corroborar si Andrés Granier fue medido ‘por la misma vara’ que Jesús Alí y Cuauhtémoc Muñoz.
En el informe presentado por Sergio Jiménez hace un par de meses, salieron a relucir irregularidades tales como: nómina inflada en diez por ciento el último año del trienio; un parque vehicular convertido en ‘fierro viejo’, del que únicamente diez por ciento estaba funcionando; una cuarta parte del sistema de desalojo de aguas de la ciudad inoperante; vialidades en deplorables condiciones, casi intransitables; evidencias de saqueo –vicios ocultos y simulación– en la ejecución de obra pública del 2012; pasivos por más de 17 millones de pesos con la CFE y un municipio endeudadísimo por los próximos ocho años.
El expediente del arqueo ordenado por De los Santos Bertruy, no sólo da pormenores del cochinero heredado, sino también exhibe irregularidades en el manejo de los recursos obtenidos vía financiamiento bancario y que se han convertido en una deuda por más de 609 millones de pesos.
Resalta el informe del contralor municipal que gran parte de esos recursos fueron desviados hacia fines distintos a lo que era la “inversión pública productiva”, que fue la razón por la que la 60 Legislatura local autorizó contratar los créditos bancarios.
Las cosas empezaron mal desde antes que el ayuntamiento de Centro suscribiera con Banobras, el 23 de agosto de 2010, el contrato de apertura de crédito por 485 millones 760 mil pesos, pues la Dirección de Programación ya había autorizado obras por 49 millones 980 mil 621 pesos, con cargo al financiamiento, “antes de estar autorizado el empréstito”.
El documento enumera otras 10 situaciones irregularidades, que van desde la falta de planeación hasta el uso distinto al de “inversión pública productiva”. Por citar un ejemplo, el régimen de Jesús Alí tomó de ese dinero, 155.7 millones de pesos, para aportaciones a programas federales que “no están consideradas dentro de los conceptos autorizados por el Congreso en el Decreto 023”.
De los nueve rubros autorizados por el Congreso, en ninguno se cumplió cabalmente, puesto que dejaron de ejecutarse proyectos autorizados, se ejecutaron otros no autorizados y “ninguno se ajustó al presupuesto aprobado”. Hasta se dieron el lujo de destinar recursos para “préstamos a otras cuentas”, sin que estas operaciones estuvieran autorizadas o previstas en el destino del crédito.
Y cuando se realizó la revisión física de las obras –que por lo visto no hicieron ni el OSF ni los actuales diputados–, los auditores de Centro reportaron 49 proyectos “con vicios ocultos” por observaciones físicas.
¿A cambio de qué se está dejando pasar la cuenta pública de la administración Alí de la Torre-Muñoz Caldera? No sorprende que los priistas que pertenecen a la 61 Legislatura la hayan aprobado en comisiones y lo confirmen en el pleno, al fin y al cabo ambos ex alcaldes pertenecen a su partido, pero ¿qué explicación pueden dar los perredistas Francisco Javier Cabrera, Tito Campos Piedra, Daniel Herrera Torruco, José Sabino Herrera, Leticia Taracena, Rafael Acosta y Alipio Ovando, que ayer votaron a favor del dictamen aprobatorio?
Los militantes del PRD deberían ser los primeros sorprendidos que sus diputados se hagan ‘de la vista gorda’.

DE MI BLOG

PUES SERÁ CÉSAR Raúl Ojeda Zubieta, el primer secretario de Gobierno que comparecerá ante el pleno de la 61 Legislatura en mucho tiempo, y será el primero de nueve –ya no siete– titulares de secretarías del Ejecutivo que citados para la glosa del Primer Informe de Gobierno de Arturo Núñez Jiménez… Al responsable de la política interna del estado le toca ir el lunes 2 de diciembre, a las cinco de la tarde… Serán dos semanas de comparecencias en el pleno, que terminarán el viernes 13… Y una cosa sí es segura: habrá más público en la Cámara de Diputados que en el palenque cuando fue el concierto de las ex Flans, durante el Festival del Chocolate.

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